Durante 2.000 años, el hombre ha estado transportando y manipulando el vino en barricas moldeadas según las necesidades de su época, sin embargo, en un mundo en perpetua evolución en el que cada uno de nosotros hemos tomado consciencia de los problemas medioambientales, de la optimización de los espacios, de la economía, cualquiera que sea el sector de su actividad, una idea ha nacido en consonancia con su época, una idea sencilla y en consecuencia eficaz y evidente.


Una concepción revolucionaria del almacenamiento y del envejecimiento en madera con un ahorro importante a lo largo de su utilización y un respeto ecológico debido a los materiales empleados 100% reciclables.
Cada barrica que sale de nuestra tonelería es un producto único, una pieza de artesanía.